Weekend des Curiosités 2013: Nacidos para el directo

"Rodríguez ha anulado, Keny Arkana también. Llueve y hace frío PERO solo una cosa podría acabar con la moral de los festivaleros y de los organizadores: Una crecida del Canal du Midi!" Así rezaban los carteles que nos encontramos el pasado viernes en la escena Le Port del festival Weekend des Curiosités organizado por Le Bikini en Toulouse. En efecto, la situación no podía ser más desfavorable. La anulación a solo un día del festival de la rapera Keny Arkana y la catastrófica previsión del tiempo parecían el colmo de las desgracias que se cebaban contra los #curieux. Y sin embargo, cuando dos días más tarde Woodkid ponía un grandioso broche para cerrar el festival, ya nadie se acordaba de Sugarman, ni de la Arkana, ni de la lluvia, que había desistido ante la energía positiva que se había concentrado junto al Canal du Midi.

La clave del éxito, además de la cuidada organización del festival y la simpatía sin fisuras de la acogida, pasó por la presencia de tres monstruos del directo que caldearon el ambiente y sintonizaron a todos los #curieux en la misma onda de buen rollo festivalero.

El primero de ellos fue Féfé, un rapero que ha derivado hacia un sonido pop melódico de efecto euforizante con el que se plantó desde su debut en solitario (Jeune à la retraite, 2009) entre las primeras figuras de la música francesa actual. Un directo de Féfé es como una fiesta de cumpleaños en la que todo el mundo sonríe de forma natural y uno se encuentra cantando y saltando de un lado para otro, siguiendo las indicaciones que el rapero-gurú del optimismo nos lanza entre chistes y con una inagotable sonrisa. El clímax llega con su tema Vilain petit canard, una declaración de principios sobre la libertad que el público corea con entusiasmo.

Tras él, la segunda salva de locura llegó con Emir Kusturica y la No Smoking Orchestra, unos veteranos de los festivales que están en gira continua y cuyo show ya conocemos de memoria a fuerza de cruzárnoslos por el camino. El efecto es infalible, Emir y sus músicos dementes despliegan a cada vez una puesta en escena provocadora en la que el público es una pieza fundamental. La magia de la música balcánica y la firme convicción festiva de la banda convierten sus conciertos en una especie de circo en el que Emir consigue hacer una clase de gimnasia a toda una fila de "bailarinas" del público y que todo el mundo grite "Fuck You MTV" como si fuéramos a asaltar la sede más próxima de la cadena musical. Si a ello añadimos los disfraces de su violinista y el duelo de virtuosismo entre este y Emir que acaba siempre dirimiéndose bajo un arco de violín gigante, se puede comprender que las nubes huyeran en espantada del Port del Canal du Midi. Si entre vosotros queda aún algún festivalero que no conoce a estos fenómenos, podéis echar un vistazo a este corte de Sziget 2012 en el que deliran en torno al clásico Bubamara.

El tercer puntal llegó al día siguiente con la aparición de los atómicos Skip the Use. Os habíamos hablado de ellos unas semanas antes del festival. Liderados por un incombustible Mat Bastard, desencadenaron al público con un concierto frenético en el que el lado punk luchaba por no arrasar con todo el resto de argumentos de la banda. "Echo de menos los noventa... en los noventa había más cosas guays como esta en las que la gente se reunía para pasarlo bien con la música... es verdad que en los noventa se hacía un montón de basura pero también hubo cosas geniales. Os venís a dar una vuelta conmigo por los 90??" y nos regalaron una versión supervitaminada del Smells like Teen Spirit de Nirvana cuyo eco aún resuena en las bodegas de los barcos anclados en Le Port. Por supuesto, fue inevitable que la demencia poseyera a los #curieux con temas como Ghost o Give me your life, del que os dejamos el vídeo oficial al final de este post.

En la despedida, Mat nos revela el secreto de los cracks del live: "Hemos venido hasta aquí esta noche a hacer algo con vosotros: este concierto lo hemos hecho entre todos, como un solo hombre, como un solo colega." Y es cierto que aquellos que tienen el don de conectar con el público y clavar los directos no son los que salen a escucharse a sí mismos, ni los que nos lanzan tres o cuatro palabras para adularnos como público, sino aquellos que no han olvidado que alguna vez estuvieron aquí abajo y que lo que tienen y lo que son no serviría de nada si no hubiera nadie gritando sus canciones y bailando al pie de los escenarios. 
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Dr. J

Give me your life by Skip The Use